Oso
pardo
Actualmente
hay unos 200
osos pardos,
y se encuentran sobre todo en la Cordillera
Cantábrica y Pirineos.
La falta de comida, cebos envenenados, o por disparos de cazadores
son las principales causas de su muerte. Además, durante los últimos
años se han encontrado osos
muertos en extrañas circunstancias.
Águila
Imperial
Pese
a que en los últimos años ha habido un aumento de ejemplares de
esta especie, la realidad es que todavía queda mucho por hacer para
su conservación. Hace unas décadas solo había 50 parejas de
ejemplares, mientras que ahora se
estima que hay unas 400.
La
gran parte de ejemplares se
encuentran en zonas del interior de la Península como
Madrid, Castilla y León, Castilla La Mancha o Extremadura. Las
principales causas de su extinción son la muerte por electrocución
o la falta de conejos.
Quebrantahuesos
Situación
parecida a la del Águila Imperial la que viven los quebrantahuesos.
La falta de comida o los tendidos eléctricos están haciendo
disminuir una especie de la que solo
existen 300 ejemplares,
principalmente en los Pirineos. Además, hay que destacar el problema
de reproducción,
y es que solo 100 ejemplares tienen la capacidad.
Lobo
Ibérico
Parece
mentira que hace 40 años, una plaga de lobos llevara al Gobierno a
pagar recompensas por su caza. La mala fama de estos animales por su
carácter hizo que hubiera una auténtica caza que ha hecho que
actualmente sea una especie en peligro
de extinción.
En los últimos años se han tomado medidas y actualmente se
estima que hay unos 2000.
Otras
especies en peligro de extinción en España son la foca
monje, el lince Ibérico,
el Ferretet,
el atún
rojo o
el Urogallo.
Entre las medidas
para evitar la extinción de
especies están:
-
Crear reservas naturales
-
Evitar la deforestación de
los bosques
-
Utilizar técnicas de inseminación artificial en
animales.
-Concienciar
a la población y
luchar contra los cebos envenenados.
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